El gobierno de México protestó con un enérgico rechazo ante
Estados Unidos por la muerte del mexicano Guillermo Arévalo Pedraza, a
consecuencia del disparo de un agente de la Patrulla Fronteriza
estadounidense en un incidente que investigan las autoridades de ambos
países.
Arévalo, de 37 años de edad, participaba en un festejo en un parque ubicado junto a la frontera en el lado mexicano de Nuevo Laredo, cuando una lancha de la patrulla fronteriza trató de impedir a un grupo de indocumentados que cruzaran a nado hacia Estados Unidos y accionaron sus armas para impactar a Arévalo Pedraza.
En la versión inicial del hecho, la patrulla fronteriza afirmó que dispararon sus armas porque fueron agredidos con piedras que les arrojaban desde la parte mexicana del Río Grande, indicó la dependencia del sector Laredo en un breve comunicado oficial.
Sin embargo, en un video realizado por un visitante estadounidense en el lugar, no se aprecia ninguna agresión con rocas desde el lado mexicano, señala el periodista Abisai Jasiel Rubio, director de RN Noticias en Laredo, quien ya revisó el material videográfico.
“En el video se oyen los gritos de la gente que desde el lado mexicano les pedían a los patrulleros fronterizos que dejaran en paz a los inmigrantes que nadaban en el río y se escuchan alrededor de cuatro disparos”, agregó Rubio.
Arévalo Pedraza murió de un tiro al pecho que le perforó un pulmón y le originó una hemorragia interna. No pudieron salvar su vida durante la atención médica que recibió en un hospital de Nuevo Laredo. La detonación provino de un arma calibre 225 AR-15, las reglamentarias de la Patrulla Fronteriza.
Ese lunes 3 de septiembre, el mexicano fallecido estaba acompañado de su esposa Nora Isabel Lam Gallegos y sus dos hijas de 9 y 10 años de edad. Aparentemente festejaban el cumpleaños de su esposa y de una de las niñas cuando ocurrió la tragedia.
De
inmediato, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) emitió un
comunicado en el que asegura que “el Gobierno de México ha expresado de
manera reiterada que el uso desproporcionado de la fuerza letal en el
ejercicio de funciones de control migratorio es inaceptable, por lo que
es fundamental tener plena claridad sobre los hechos ocurridos”.
La Cancillería mexicana a través del Consulado de México en Laredo urgió una investigación exhaustiva de los hechos y las sanciones que se deriven. Por su lado, la Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) también inició pesquisas del incidente, así como la Procuraduría del estado de Tamaulipas, la cual ya ha entrevistado a varios testigos.
La portavoz del Consulado de México en Laredo, Ana Laura Benavides, indicó a HuffPost Voces que apenas se están buscando y recabando las evidencias del incidente en la frontera y el caso de la muerte del mexicano está bajo investigación.
El cuerpo de Arévalo Pedraza fue trasladado a Monterrey, Nuevo León, donde ya estaba siendo velado en su funeral por su familia y amistades.
“A raíz de un hecho de esta naturaleza, hay un clima de repudio y rechazo entre la sociedad de Nuevo Laredo”, describió el periodista Rubio.
Como parte de las pesquisas del caso, la FBI ya cuenta con el video del incidente que tomó otra visitante al parque ese día. También trascendió que los agentes de la patrulla fronteriza involucrados están detenidos y son interrogados sobre los hechos.
Según el portavoz de la FBI, Erick Vasys, también se está investigando sobre el arrojo de piedras como una forma de ataque a los agentes federales y los detalles del tiroteo que le causó la muerte al mexicano.
En julio se suscitó otro incidente similar en la frontera de Brownsville, Texas, cuando un agente de la Patrulla Fronteriza mató de un tiro al mexicano Juan Pablo Santillán de 30 años de edad, en un área cercana al río Bravo donde el joven cortaba leña.
Otro hecho fatal ocurrió en junio de 2010, cuando un agente de la Patrulla Fronteriza disparó y mató en la frontera de El Paso al adolescente de 15 años de edad, Sergio Adrián Hernández Güereca, también en las cercanías del río Bravo. El caso aún está bajo investigación y se han presentado demandas civiles en cortes federales y del estado de Texas.
Aparte de esas dos muertes de connacionales, se han registrado al menos siete casos de agresiones en los últimos años a lo largo de la frontera por agentes de la Patrulla Fronteriza.
A la fecha, ningún agente de la Patrulla Fronteriza ha confrontado cargos criminales.<iframe width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/o2lGIkSsZnQ" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Arévalo, de 37 años de edad, participaba en un festejo en un parque ubicado junto a la frontera en el lado mexicano de Nuevo Laredo, cuando una lancha de la patrulla fronteriza trató de impedir a un grupo de indocumentados que cruzaran a nado hacia Estados Unidos y accionaron sus armas para impactar a Arévalo Pedraza.
En la versión inicial del hecho, la patrulla fronteriza afirmó que dispararon sus armas porque fueron agredidos con piedras que les arrojaban desde la parte mexicana del Río Grande, indicó la dependencia del sector Laredo en un breve comunicado oficial.
Sin embargo, en un video realizado por un visitante estadounidense en el lugar, no se aprecia ninguna agresión con rocas desde el lado mexicano, señala el periodista Abisai Jasiel Rubio, director de RN Noticias en Laredo, quien ya revisó el material videográfico.
“En el video se oyen los gritos de la gente que desde el lado mexicano les pedían a los patrulleros fronterizos que dejaran en paz a los inmigrantes que nadaban en el río y se escuchan alrededor de cuatro disparos”, agregó Rubio.
Arévalo Pedraza murió de un tiro al pecho que le perforó un pulmón y le originó una hemorragia interna. No pudieron salvar su vida durante la atención médica que recibió en un hospital de Nuevo Laredo. La detonación provino de un arma calibre 225 AR-15, las reglamentarias de la Patrulla Fronteriza.
Ese lunes 3 de septiembre, el mexicano fallecido estaba acompañado de su esposa Nora Isabel Lam Gallegos y sus dos hijas de 9 y 10 años de edad. Aparentemente festejaban el cumpleaños de su esposa y de una de las niñas cuando ocurrió la tragedia.
La Cancillería mexicana a través del Consulado de México en Laredo urgió una investigación exhaustiva de los hechos y las sanciones que se deriven. Por su lado, la Oficina Federal de Investigaciones de Estados Unidos (FBI) también inició pesquisas del incidente, así como la Procuraduría del estado de Tamaulipas, la cual ya ha entrevistado a varios testigos.
La portavoz del Consulado de México en Laredo, Ana Laura Benavides, indicó a HuffPost Voces que apenas se están buscando y recabando las evidencias del incidente en la frontera y el caso de la muerte del mexicano está bajo investigación.
El cuerpo de Arévalo Pedraza fue trasladado a Monterrey, Nuevo León, donde ya estaba siendo velado en su funeral por su familia y amistades.
“A raíz de un hecho de esta naturaleza, hay un clima de repudio y rechazo entre la sociedad de Nuevo Laredo”, describió el periodista Rubio.
Como parte de las pesquisas del caso, la FBI ya cuenta con el video del incidente que tomó otra visitante al parque ese día. También trascendió que los agentes de la patrulla fronteriza involucrados están detenidos y son interrogados sobre los hechos.
Según el portavoz de la FBI, Erick Vasys, también se está investigando sobre el arrojo de piedras como una forma de ataque a los agentes federales y los detalles del tiroteo que le causó la muerte al mexicano.
En julio se suscitó otro incidente similar en la frontera de Brownsville, Texas, cuando un agente de la Patrulla Fronteriza mató de un tiro al mexicano Juan Pablo Santillán de 30 años de edad, en un área cercana al río Bravo donde el joven cortaba leña.
Otro hecho fatal ocurrió en junio de 2010, cuando un agente de la Patrulla Fronteriza disparó y mató en la frontera de El Paso al adolescente de 15 años de edad, Sergio Adrián Hernández Güereca, también en las cercanías del río Bravo. El caso aún está bajo investigación y se han presentado demandas civiles en cortes federales y del estado de Texas.
Aparte de esas dos muertes de connacionales, se han registrado al menos siete casos de agresiones en los últimos años a lo largo de la frontera por agentes de la Patrulla Fronteriza.
A la fecha, ningún agente de la Patrulla Fronteriza ha confrontado cargos criminales.<iframe width="420" height="315" src="http://www.youtube.com/embed/o2lGIkSsZnQ" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
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