El Gráfico de la Semana: Subir los impuestos para pagar los derechos a beneficios

Miryam Lindberg

Todos sabemos que 2 más 2 son 4 y que uno no puede gastar más allá de sus posibilidades o si no terminará en la ruina – menos los políticos. Para la mayoría de la clase política, el gasto es como una fiesta sin fin y que no hay que exagerar con las preocupaciones del gasto porque el problema se solucionará “mañana”. Pero el mañana ya nos está tocando la puerta.
Tres son los programas de derechos a beneficios que nos traen por la calle de la amargura: El Seguro Social, Medicare y Medicaid. Los políticos saben que estos tres programas son las vacas sagradas del presupuesto, temen siquiera hablar de recortes porque eso los dejaría expuestos a la ira electoral de muchos beneficiarios. Sin embargo, la cruda realidad nos dice que no podemos seguir por el mismo camino, pidiendo prestado dinero que no tenemos para cubrir el financiamiento de estos programas.

Como muestra el Gráfico de la semana, para poder pagar el costo de estos programas cada día hacen falta mayores impuestos y va a llegar un momento en el que esos impuestos se convertirán en confiscatorios. Si Ud. pertenece a la clase media, trabaja y gana, digamos, 1,000 dólares, ¿le gustaría que el gobierno federal se quedara con el 63% de ese dinero y Ud. sólo pudiera contar con el 37%? Pues, hacia ese camino vamos si no reformamos ya los tres programas de derechos a beneficios más grandes de la nación. Habría que reflexionar mirándonos en el espejo de Europa que está padeciendo una inmensa crisis por el peso de una deuda insostenible.